Injerto: otro tipo de propagación vegetativa

El injerto es un tipo de propagación vegetativa (no reproducción) artificial de las plantas. Con este procedimiento, de dos individuos nace uno nuevo, y habitualmente el que domina es el que se injerta. 

En el injerto se establece una interacción entre el pie de raíz, el PATRÓN o porta injerto, y el VASTAGO de injerto que se inserta en él. Las dos partes de la nueva planta creada influyen en forma reciproca, una en la otra. Un ejemplo típico son los injertos en frutales y rosales. El objetivo del injerto puede obedecer a diversos motivos: resistencia a enfermedades, adaptación a suelos pobres, acelerar el ciclo de la planta, obtener plantas de menor tamaño para poder cosechar con maquinarias, para reproducir híbridos, entre otros objetivos. 

Generalmente los vástagos más apropiados para injertar son los de un año. Además, deben ser rectos y sin ramas laterales y no deben presentar flores sino yemas de hojas.

Cuando más alto sea el injerto, mayor será la influencia del patrón en la nueva planta.

Existen diversos tipos de injertos, en esta oportunidad desarrollaremos uno de las más frecuentes que es el injerto de yema o de escudete. Se debe realizar cuando la planta tiene buena circulación de savia. Para esta práctica debemos tener un elemento de corte (cuchillo o navaja muy bien afilada y desinfectada). Se hace un corte en forma de T en el patrón y luego con la hoja del cuchillo se levantan las dos partes de la corteza, que servirá para envolver el vástago. De la planta para usar de injerto sacaremos una yema(vástago) que colocaremos en el corte del patrón. Posteriormente se debe atar el sector del injerto, atadura que debe ser firme para permitir la unión intima entre el patrón y el vástago.

                 Ing Miguel Hugo Piloñeta

Cel: 2966634444

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